Comunidad de práctica

Nos convertimos en hablantes interactuando con otras personas y compartiendo en grupo distintas prácticas como parte de un proceso dinámico y continuo que dura todo nuestro ciclo vital. Estas actividades compartidas condicionan las prácticas lingüísticas de cada persona, que acabará convirtiéndose en un tipo de hablante capaz de amoldarse a distintos contextos y circunstancias. Por ello, la noción de comunidad de práctica (community of practice) es una de las herramientas más útiles de las que disponemos para analizar cómo se crean, mantienen o modifican las diferentes subjetividades de los hablantes en las prácticas (colectivas) desarrolladas en su día a día. Un grupo de jóvenes que se junta para cantar rap. Adolescentes que entrenan y juegan partidos de baloncesto. Adultos que ensayan entre semana y bailan todos los domingos en la plaza de su barrio. Todos estos grupos son ejemplos de comunidades de práctica. Grupos en los que las personas interaccionan y de donde surgen prácticas e ideologías lingüísticas, ya que en estos contextos la lengua no es un elemento independiente, autónomo y/o aislado: la lengua aparece vinculada tanto con la actividad concreta desarrollada en el grupo como con el conjunto de la estructura social.

En la investigación EquiLing

La comunidad de práctica puede ser de gran utilidad desde el punto de vista teórico-conceptual y metodológico porque:

– Facilita el estudio de los y las hablantes ya que, a través de prácticas concretas, podemos analizar las dinámicas (lingüísticas) que se crean entre las distintas personas, el grupo y la estructura social.

– Dado que la identidad no es algo fijo y el uso lingüístico es un proceso de aprendizaje continuo, la comunidad de práctica es un espacio muy apropiado para observar ese proceso identitario y de construcción lingüística. 

– El modelo de comunidad de práctica asume la diversidad presente en cualquier grupo. Además provee de un marco de análisis dinámico y cambiante que asume que las personas pueden participar a la vez en más de una comunidad.

Para saber más

Eckert, P & McConnell-Ginet, S. (1992). Think practically and look locally: Language and gender as community-based practice. Annual Review of Anthropology, 21(1), 461-488.

Eckert, P. (2006). Communities of Practice. In E. K Brown, R. E Asher, J. M. Y Simpson (Eds.), Encyclopedia of Language and Linguistics, Volume 2 (pp. 683-685). Elsevier.

Lave, J. & Wenger, E. (1991). Situated Learning. Legitimate Peripheral Participation. Cambridge University Press.

Holmes, J. & Meyerhoff, M. (1999). The Community of Practice: Theories and methodologies in language and gender research. Language in Society, 28, 173–183. 

Una comunidad de práctica es un grupo de personas unidas en torno a un objetivo compartido y mantenido en el tiempo. Las personas que integran el grupo desarrollan una actividad de manera conjunta movidas por un interés común. Fruto de esa interacción emergen diferentes prácticas: modos de actuar, creencias, valores, relaciones de poder y, también, elecciones lingüísticas y formas de hablar.